Los trastornos adaptativos
comprenden una categoría diagnóstica caracterizada por la repsuesta emocional
ante un episodio estresante. Es típico
que el problema sea un factor económico, una enfermedad médica o un problema de
relación. Los síntomas se inician a los siguientes 3 meses del factor
estresante, y se desaparece a los 6 meses.
EPIDEMIOLOGÍA:
Prevalencia en la población
general se encuentra entre el 2-8%. Es mas común en mujeres con una relación
2:1 respecto a los hombres. Además las mujeres solteras son la población mas
vulnerable. En niños y adolecentes no hay diferencia entre sexo. Aparecen en cualquier edad aunque se diagnostican
más comúnmente en adolescencia.
Los factores estresantes más
comunes en adolescentes son: problemas escolares, el rechazo, el divorcio de
los padres y el abuso de sustancias. Y los factores estresantes desencadenantes
de los adultos son: problemas conyugales, divorcio, el cambio de entorno y los
problemas económicos.
ETIOLOGÍA:
Por definición, un trastorno
adaptativo se desencadena a causa de uno o más factores estresantes. La
intensidad del factor determina la gravedad del trastorno. La potencia de un
factor viene dada por su intensidad, cantidad, duración, reversibilidad, el
entorno y el contexto personal.
Los factores pueden ser únicos,
como un divorcio o una pérdida de trabajo; o pueden ser múltiples como la
muerte de una persona importante, que coincide con que está enfermo y pierde su
empleo. También pueden ser recurrentes como las dificultades de una empresa o continuos como una enfermedad crónica o la
pobreza.
Factores psicodinámicos:
Para comprender los trastornos
adaptativos resulta fundamental entender 3 factores: la naturaleza del
estresante, sus significados consciente e inconsciente y la vulnerabilidad
previa del paciente. Que el paciente tenga una enfermedad orgánica o un
trastorno de la personalidad hacen al paciente vulnerable. Un mismo factor de estrés
puede producir respuestas diferentes en distintas personas.
La investigación psicoanalítica
ha insistido en el papel de la madre y del entorno en el que se produce el
desarrollo en la posterior capacidad del sujeto para responder al estrés.
Durante las primeras etapas del desarrollo, cada niño elabora un conjunto
propio de mecanismos de defensa para hacer de frente a sucesos estresantes. Estos
mecanismos le permiten al adulto enfrentarse a situaciones estresantes sin
descompensarse.
DIAGNÓSTICO Y CUADRO CLÍNICO:
Los trastornos adaptativos siguen
al factor estresante, aunque sus síntomas no comienzan necesariamente de
inmediato. Pueden pasar hasta 3 meses entre la acción del estresante y la
aparición de los síntomas. Los rasgos depresivos, ansiosos y mixtos son los más
frecuentes entre los adultos. Los síntomas físicos son mas comunes en niños y
ancianos, aunque pueden estar en cualquier redad. También puede manifestarse en
forma de conducta agresiva y conducción temeraria, consumo excesivo de alcohol,
incumplimiento de las obligaciones legales, retiramiento, signos vegetativos,
insomnio y conducta suicida.
CRITERIOS
DIAGNÓSTICOS:
Trastorno adaptativo con estado de ánimo deprimido:
Los síntomas predominantes son el
estado de ánimo deprimido, el llanto y la desesperanza. Debe diferenciase del
trastorno depresivo mayor y del duelo no complicado.
Trastorno adaptativo con ansiedad:
SE observan síntomas de ansiedad
como palpitaciones, nerviosismo y agitación. Debe diferenciarse de un trastorno
de ansiedad.
Trastorno adaptativo mixto, con ansiedad y estado de ánimo deprimido:
Los pacientes presentan al mismo
tiempo síntomas de ansiedad y de depresión que no cumplen con los criterios de
una trastorno depresivo o de ansiedad definido.
Trastorno adaptativo con trastorno del comportamiento:
La principal manifestación es una
conducta en la que se violan los derechos de los demás o se hace caso omiso de
las normas y reglas sociales propias de la edad del sujeto. Ej: ausencia
injustificada de la escuela, vandalismo, peleas.
Trastorno adaptativo no especificado:
Representa una categoría residual
que engloba las reacciones inadaptadas atípicas del estrés. Por ejemplo:
negación absoluta, incumplimiento grave del tratamiento y el retraimiento
social.
TRATAMIENTO:
Psicoterapia:
Sigue siendo el tratamiento de
elección para los trastornos adaptativos. La terapia de grupo es especialmente
útil en pacientes que han sufrido un estrés de naturaleza parecida, como por
ejemplo, un grupo de jubilados o pacientes sometido a diálisis renal. La psicoterapia individual ofrece la
oportunidad de analizar el significado que tiene el factor estresante para el
paciente. La psicoterapia puede ayudar al paciente a adaptarse a los factores
de estrés que no son reversibles o no tienen una duración limitada.
Intervención en la crisis:
Son tratamientos a corto plazo que
pretenden ayudar a las personas con trastornos adaptativos a solucionar
rápidamente estas situaciones mediante técnicas de apoyo, sugestión,
apaciguamiento, modificación del entorno e, incluso, la hospitalización, en
casos necesarios.
Tratamiento farmacológico:
No se tienen estuios que
demuestren la eficacia de intervenciones farmacológicas en personas con
trastornos adaptativos. Se utilizan fármacos durante periodos cortos de tiempo
para tratar síntomas específicos. Este tratamiento no se puede prolongar por
mucho tiempo.
Los pacientes pueden respondes a
los ansiolíticos o a los antidepresivos. Los que sufren una ansiedad grave
pueden beneficiarse de ansiolíticos como el diazepam. Mientras que a los
pacientes en estado de retraimiento o inhibición podría servirles un
tratamiento corto con psicoestimulantes. Pueden emplearse antisicóticos cuando
existan signos de descompensación o de psicosis inminente. Se ha observado que
los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina son útiles para
tratar las manifestaciones del duelo traumático.